sábado, 9 de junio de 2007

DANZAS DEL VIENTRE. JUNIO-2007

esta es GEMMA la monitora de la Danza del Vientre que hacemos en la tertulia

Al fondo en la parte inferior se ve a Raúl, que presentó todo el programa

preparó todo un espectáculo de danzas muy variado

Estas son nuestra chicas que lo hicieron muy dignamente

Margarita, Pilar, Gemma y Rosa, fiu,fiu...








esta muchacha bailó una danza oriental con una pitón de considerable tamaño





El muchacho dominaba el Tar y el tambor hindú


bailaron con su ritmo trepidante


Las participantes del espectáculo, dominaba abrumadora mente el personal femenino, solo hubo un hombre con valor.


Las pitones participaron también.

Y se dejaron acariciar por las danzantes


MUY BIEN GEMMA

jueves, 31 de mayo de 2007

DANIELA EN CARNAVAL




Carmen Terrón nos manda unas fotos de su nieta Daniela.




jueves, 17 de mayo de 2007

PREMIOS LITERARIOS



ALFREDO CLOS el hijo de Montse Clos ha ganado dos primeros premios de NARRACIÓN Y POESIA, nuestra enhorabuena a esta joven promesa literaria.

Con los siguientes trabajos:


CONCURSO LITERARIO DEL I.E.S. PILAR LORENGAR

CURSO 2.006-07

SÓLO A UN SALTO

La noche era fría, pero todos juntos hacíamos frente a la oscuridad que te helaba los huesos. Encendí una hoguera con pequeñas ramas que había recogido por la mañana temprano. Parecía mentira, pero una pequeñita luz en aquella oscuridad te hacía sentir más seguro y gracias a ella podía ver los rostros de mis camaradas y leer, claramente, el cansancio de tantos días en aquel bosque de pinos.

Las horas pasaban lentamente y cada vez el frío nos mordía con más fuerza.

De vez en cuando llovía, algo que por la edad que tengo no estaba familiarizado a ver.

Pronto se acercara el día en el que realizaré la hazaña que me trajo aquí, algo que si sale bien, me proporcionará un futuro más halagüeño. Bueno, no me reconcomo la cabeza porque debo estar fresco para ese día.

Ahora toca cerrar los ojos y pensar qué deparará el mañana y dormir y soñar, algo que cada vez es más fácil. Allá donde los sueños son verdad, donde las oportunidades de sobrevivir dignamente se hacen realidad. Bueno, mañana será otro día.

Me desperté y no sé si queriendo o sin querer, me di cuenta de que algo estaba pasando, nadie se comportaba de forma natural, después de todo, al cabo de dos meses terminas por conocer a toda la gente.

Me levanté.

-¿Qué pasa? Pregunté a mi hermano Rahim.

-¿Cómo que ya es la hora? Insistí con gesto sorprendido.

-Sí hermano, ha llegado Ossama, ayer por la noche se paseó por los alrededores y parece que la calma reina por momentos y el invierno se nos echa encima...

-Está bien- dije con cara de miedo, porque, sinceramente, llegar hasta donde estoy, me había costado muchísimo, pero cuando recibí la noticia me entró un pánico espantoso y mi hermano Rahim lo notó.

-Tranquilo, todo saldrá bien.

Apenas comí nada. Me habían hablado de ella. Decían que era alta, muy alta, tan alta que podías rascar el cielo. Decían que estaba afilada, que podía encoger el corazón de un hombre don sólo mirarla.

Las horas pasaban y el sol empezaba a esconderse entre los árboles. Todo lo había practicado decenas de veces, pero ahora no sabía qué tenía que hacer.

Agarré mi abrigo mil veces remendado, el gorro de lana y unos guantes (los rellené bien de hojas secas para aumentarlos de grosor).

-¡Mofat!, oí la voz de mi hermano.

-¡Ven rápido, no hay tiempo!- dijo apresurado Rahim.

-¡Agarra esta escalera por un lado! ¡Corre!

La escalera, esa escalera en la que mi hermano y yo estuvimos trabajando durante estos dos últimos meses, era para mi como una llave. La llave que abría muchas puertas en la vida de una persona como yo.

Empezamos adentrarnos en el bosque de pinos en dirección hacia donde Rahim siempre me había prohibido ir. De repente, se acabaron los árboles y allí, en mitad de la nada, se erguía la valla, que sinceramente, la habían descrito bien.

Todos nos agazapamos en el suelo esperando el momento oportuno.

El silencio desgarraba la noche sin piedad alguna.

Cuando dieron la orden, mi hermano y yo corrimos hacia ella, colocando nuestra “llave” en la cerradura.

Escalamos rápidamente hasta lo más alto y sin pensar en nada, nos tiramos al vacío.

Y la puerta se abrió.

Ahora mismo estoy corriendo hacia la oscuridad sin pensar, sin sentir, sin saber si mi hermano y los demás lo habrán conseguido.

Corriendo hacia un futuro diferente al que me esperaba. Si no fuera así, no me hubiese arriesgado.

ALFREDO CLOS

MODALIDAD: NARRACIÓN. PRIMER PREMIO



UN BESO Y UN ABRAZO

Linda niña de mis ojos,

claro de mi despertar,

maldigo mis sueños rotos,

una vez soñados ya.

De aquel amargo deseo

sólo quedó mi dolor

y el triste frío recuerdo

al no sentir tu calor.

Puede que no fuera cierto

aún así seria el cielo,

aún así sería el viento,

allí hogar de luceros,

morada de estrellas blancas,

si te asomas podrás verlos

brillando en la noche clara.

¿Dónde quedará ese beso?

¿Dónde morirá ese abrazo?

y el suspiro de mi anhelo

ayer perdido en tus labios.

Hoy perdí algo, no sé

quizás fuera tu mirada

en un suave atardecer.

Sabe quién dónde estarán

todos los besos y abrazos

que jamás te llegué a dar.

ALFREDO CLOS

(Primer premio en modalidad “poesía”)